¿Te preguntas a veces cómo irás a usar cuando seas grande lo que tienes que estudiar ahora? Seguramente Jesús se preguntó lo mismo.
Te puedes imaginar a Jesús de niño cuando le enseñaban las leyes bíblicas de los libros del Antiguo Testamento preguntándose si esos estudios le serían tan útiles como lo sería aprender carpintería de su padre José.
Sin embargo, más tarde en la vida de Jesús, Él se valió enormemente de todos esos conocimientos adquiridos durante todos esos años de estudio. Por ejemplo, podía hablar de igual a igual con los grandes maestros de religión del templo siendo un niño más mayorcito. (Lucas 2:46-47).
Más adelante, durante los años de Su ministerio en la tierra, se valió de lo que había aprendido para dar clases a Sus seguidores. Jesús también se valió de Sus conocimientos para poder responderles a quienes lo acusaban, así como para hablar con los eruditos que se le acercaban en busca de consejo.
Es importante seguir estudiando y no darse por vencidos. Algún día tú también apreciarás los conocimientos adquiridos gracias a que estudiaste.
Autor anónimo. Ilustraciones: Leila Shae. Colores: Catherine Lynch. Traducción: Adriana Vera y Antonia López.© La Familia Internacional, 2013