Mamá: Niños, miren qué clima tan hermoso tenemos hoy, el primer día de nuestro mini campamento de tres días.
Billy: Mamá, no me siento bien. Tengo otra vez la nariz tapada.
Billy: [Se sorbe la nariz].
Mamá: Pensé que ya se te había pasado el resfriado. Probablemente te vendrá bien descansar un poco más.
Mamá ora: Gracias, Jesús, por la buena salud que disfrutamos. Te pedimos que ayudes a Billy a descansar ahora y que pronto se encuentre mejor.
Billy alaba: Gracias, Jesús, por cuidarme bien. Te ruego que me ayudes a recuperarme para poder participar de las actividades del mini campamento.
Billy: Al menos tengo esta revista tan chévere para leer.
Mamá: Después te traeré algo más para leer en mi tableta. ¿Qué te parece «La ventaja de las decepciones»?
Billy: Sí. ¡Gracias, mamá!
Lulú: ¿Podemos tener algo especial para desayunar?
Lulú (pensando): Oh, no me di cuenta, hay pan de pasas.
Lulú: ¡Gracias por este pan de pasas tan rico!
Beto: Los huevos revueltos están deliciosos. ¡Gracias, Sr. José, por el desayuno!
Dani: ¡Gracias, Sr. José!
Al terminar cada página, deténganse a contar cuántas veces aparece la gratitud en ella.
Narración: Después leer Lucas 17:11-19.
Sr. José: Este relato de la Biblia siempre me motiva a demostrar más aprecio.
Beto: ¡Gracias, Sr. José, por esta clase de la Biblia!
Sr. José: Repasemos ahora nuestro versículo de memorizar.
Andy: 1 Tesalonicenses 5:16-18.
Todos los niños: «Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.»1
Sr. José: ¿Qué pasa, Dani? Creí que te sabías esos versículos.
Dani: Sr. José, siempre se me olvida el final.
Sr. José: De vez en cuando a todos se nos olvidan algunos versículos. Podemos ayudarnos entre nosotros.
Dani: Jesús, ayúdame a no rendirme en memorizar este versículo. ¡Gracias por el ánimo del Sr. José!
Sr. José: Escribiré de nuevo el segundo versículo para que lo repasemos. Leamos juntos en voz alta este versículo tres veces.
Narración: Leen el versículo tres veces, entonces…
«Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús».
Dani: ¡Lo tengo! ¡Gracias, Sr. José, por ayudarme!
Narración: Por la tarde
Mamá: Billy, ¿te sientes mejor?
Billy: Todavía moqueo mucho.
Mamá: Creo que deberías quedarte acostado y descansar toda la tarde.
Billy: ¡Pero eso significa que no podré ir de paseo en bicicleta con todos los demás!
Mamá: Lo siento, cariño. Te acuerda de ese versículo: «Entrad por Sus puertas con acción de gracias…
Billy: …por Sus atrios con alabanza». Es el Salmo 100, que memoricé la semana pasada.
Mamá: ¡La alabanza es eficaz! ¿Por qué cosas estás agradecido?
«Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.» (Filipenses 4:6-7.)
Billy: Gracias, Jesús, que soy el único enfermo. Te ruego que me recupere pronto.
Mamá: Gracias por cuidar bien a Billy.
Billy: Y, Jesús, te ruego que continúes manteniendo saludables a los otros chicos para que disfruten de todas las actividades.
Billy: Gracias, mamá, por prestarme tu tableta.
Billy: ¡Y gracias, Jesús, por amarme!
Billy: Todavía me siento enfermo, pero ahora estoy más contento.
Mamá: ¡Cuando alabamos al Señor, es como si tomáramos una espada y cortáramos la tristeza y el pesimismo!
Narración: Después de la siesta
Sr. José: Hoy, después de nuestro paseo en bicicleta, mi padre, el Sr. Rodríguez, nos ha invitado a su oficina.
Sr. José: Esta casa es la finca de vacaciones de mi padre, y nos la ha ofrecido para esta actividad de tres días. Veamos qué podemos hacer para demostrarle a mi padre agradecimiento y lo contentos que estamos de estar aquí.
Narración: Más tarde, en la oficina del Sr. Rodríguez.
Sr. José: Billy está enfermo, pero me pidió que te dé las gracias por prestarnos tu casa.
Lulú: Lo estamos pasando bomba. Comenzamos el día con una clase sobre agradecimiento. Y luego dimos un paseo en bicicleta por el bosque cercano.
Dani: Hoy memorizamos un fragmento de la Biblia. ¿Le gustaría escucharlo?
Sr. Rodríguez: ¡Sí!
Dani: «Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.»
Andy: ¡Jesús hizo hoy un montón de cosas chéveres por nosotros!
Beto: ¡Hasta tuvimos pan de pasas para desayunar!
Niños: ¡Gracias, Sr. Rodríguez!
Sr. Rodríguez: ¡Ustedes niños me hacen muy feliz!
Sr. Rodríguez: Ahora me toca a mí decir las cosas por las que estoy agradecido.
Sr. Rodríguez: Veamos. Hoy Jesús me ayudó a…
Narración: A la hora de acostarse
Billy: ¡Me siento mucho mejor! ¡Mamá dijo que mañana podré participar en las actividades!
Lulú: ¡Mañana iremos de excursión y a nadar!
Sr. José: Antes de ir a acostarnos, ¿qué aprendieron hoy?
Billy: A ser agradecidos. Cuando me puse a pensar en todas las cosas buenas de hoy y dejé de compadecerme de mí mismo, me resultó más fácil relajarme y obtener el descanso que necesitaba para recuperarme.
Beto: Cuando le contamos a tu padre todas las cosas por las que estamos agradecidos, ¡se puso muy contento!
Mamá: «¡El Señor habita en las alabanzas de Su pueblo!» (Ver Salmo 22:3.)
1 1 Tesalonicenses 5:16-18
Texto: Evan Kallen. Ilustración: Zeb. Color y diseño: Roy Evans.Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2022